¡Solo sigue festejando, yo!
La fiesta no tiene que detenerse solo porque te graduaste de la universidad. De hecho, una vez que tienes un trabajo y estás ganando un buen ingreso, la fiesta asciende a nuevas alturas. Las fiestas se hacen más grandes, mejores y más salvajes. Las bebidas son de mayor calidad y los lugares son más interesantes; tienen vistas mucho mejores, y a menudo se encuentran en países extranjeros o en casas de playa privadas en el mar.
Si realmente quieres seguir con la fiesta, ingresa a una industria donde la gente sigue de fiesta toda la noche, durante años y años. Cualquiera de las profesiones de glamour de primer nivel debería funcionar bien: cine, moda y música. Pero no se preocupe, se divierten casi igual de duro en las profesiones de glamour de segundo nivel: arte, publicidad y publicaciones.
¡Incluso se divierten bastante en ciencia, periodismo, academia y finanzas!
- ¿Debo preguntarle a mi entrevistador universitario sobre el establecimiento de un nuevo club en la escuela? Si hago eso, ¿entenderían mal que me importan más las actividades adicionales que estudiar?
- ¿Cuál es un gran error que podría evitar en la universidad?
- ¿Qué es exactamente el “éxito universitario”?
- ¿Qué trabajo puedo hacer en mi primer año de universidad en India?
- ¿Debo unirme a la serie de pruebas FIITJEE o la serie de pruebas ALLEN si soy un gotero?
Simplemente no te conviertas en uno de esos agotadores que nunca se dieron cuenta de que la fiesta terminó. Los ves deambulando como zombis en Tailandia, Costa Rica e Ibiza; en cortes de pelo y modas una o dos décadas desactualizadas, piel desgastada y malos trabajos de tinte. Siempre están buscando la próxima fiesta, pero no saben cómo mejorar su juego de fiesta. Están atrapados en la fiesta (y la mentalidad) de sus veintes fiesteros. ¡Las fiestas cambian, amigo, como las fiestas!
Luego, cuando tienes una familia (si tienes una familia), aún puedes festejar, pero las fiestas cambiarán. Verás a tu hijo o hija festejando al estilo de los niños: fiestas de cumpleaños en Chuck-E-Cheese, problemas de Halloween y quedarte despierto hasta tarde en la víspera de Navidad esperando a que Papá Noel deje caer la chimenea.
Te darás cuenta de que es genial ver la fiesta de tus hijos. Dirás: “¡Espero que se diviertan tanto como yo cuando era joven!”
¡Fiesta, amigo!