Soy uno de los tres niños, y todos jugamos “sucio”. Entonces, mi mamá encontró cosas interesantes mientras lavaba nuestra ropa embarrada:
- Rocas No solo una vez, dos veces u ocasionalmente. Cada vez. Revisaba todos los bolsillos, ponía en marcha la máquina y escuchaba el sonido * tintineo * que indicaba que otra roca se había desprendido. Nos regañaba, todos decíamos “Sí, mamá”, y al día siguiente habría más rocas.
- Polvo blanco. Por alguna razón, alguien una vez se llenó los bolsillos con tiza triturada. Todos culpamos a mi hermano, pero honestamente podría haber sido yo.
- Uñas oxidadas Mi jardín está lleno de basura vieja que alguien enterró sin razón alguna (principalmente clavos y restos de metal), así que supongo que los niños queríamos comenzar una colección.
- Un cráneo de pájaro. Mi hermano quería salvar la “roca graciosa” que encontró en la tierra.
- Rolly-polys (también conocidos como chinches). Mi hermanito los recogería afuera y guardaría docenas en su bolsillo para guardarlos. Y luego olvídate de ellos. Cuando se quitaba la ropa, los insectos se desenrollaban lentamente y corrían a protegerse. Debajo de la lavadora.