No tengo ganas de ir a mis clases de entrenamiento. ¿Qué tengo que hacer?

Mi mamá: Por favor, ayúdame en estas tareas domésticas.

Yo: Momzy yaar, no me gusta hacer esas cosas.

Mi mamá: ( en el típico estilo de madre india ) ya lo sé, pero desafortunadamente tu papá no te va a proporcionar una criada para todo esto mientras estás en tu casa de los suegros, es decir, después del matrimonio.

Yo: Ohh por favor mamá, contrataré uno yo mismo ya que estaré ganando para entonces.

Mi mamá: ¡ oh en serio! a quién le dijiste que el trabajo se le permitiría allí y, de ser así, se le permitiría quién le dijo que se le permitiría contratar a una empleada doméstica.

Yo: ( ohh ghosh, no sirve de nada discutir con mi supuesta madre obstinada ) Ohkay mumma, lo voy a hacer de todos modos.

Mi mamá: Buena chica, te amo baccha.

Lo que hice fue usar un pijama con bolsillos, luego tomé mi teléfono y tapones para los oídos, lo inserté en mis oídos, comencé a escuchar música, guardé el teléfono móvil en el bolsillo y comencé a hacer las cosas. )

Mamá feliz, yo feliz, todo equilibrado 🙂

Espero que hayas entendido mi punto. Ahora llegando a su situación: –

Siempre debe tomar clases de demostración antes de unirse a cualquier clase de entrenamiento.

En su caso, si no está disfrutando de sus clases, cámbielo lo antes posible. A continuación, puede probar otras pocas clases y unirse a la que más le convenga.

Si no es posible que cambies ahora, acéptalo como está y hazlo maravilloso a tu manera, como interactuar con tus profesores y compañeros, hacer más amigos, hablar con todos y una vez que te mezcles con tus amigos, terminarás finalmente ser feliz con las clases 🙂

si todavía no, siempre tiene la opción de cambiarlo el año que viene de todos modos. Por lo tanto, primero trate de adaptarse y, de lo contrario, ignórelo de todos modos y concéntrese más en los estudios y se ocupará de eso para que no tenga tiempo de pensar en su entorno o cualquier otra cosa.

Siempre haz lo que amas y si no puedes, comienza a amar lo que necesitas hacer 🙂

Ve, independientemente de si tienes ganas de ir o no, lo peor que puedes hacer es engañar a tus padres. Si todos pudiéramos hacer lo que sentimos, el mundo llegaría a su fin. Entonces, concéntrate ahora para que no tengas que luchar por el resto de tu vida.