¿Cuáles son los pros y los contras de unirse a un nuevo profesor para un doctorado y eso también en una de las escuelas de posgrado más solicitadas?

Acabo de completar un doctorado donde hice esto mismo.

Una vez escuché a un viejo científico sabio decir: “Si haces tu doctorado con un nuevo profesor, puedes hacer o deshacer las carreras de los demás”.

Afortunadamente, tuve una experiencia muy positiva con mi asesor de doctorado. Cuando me uní por primera vez, solo tenía cinco personas investigando por ella (incluyéndome a mí), y tres de esos cinco se habían unido dentro de los dos meses posteriores a mi ingreso.

Ahora, cinco años después, probablemente tenga más de 20 personas en su laboratorio, incluidos científicos del personal, posdoctorados, estudiantes graduados e investigadores universitarios. Ahora es profesora titular y es la directora de varias iniciativas de investigación. No digo que deba agradecer todo o la mayor parte de su éxito, pero ciertamente me he beneficiado de su creciente éxito, y creo que ambos reconocemos y apreciamos el trabajo en equipo en el que invertimos nosotros y todos los demás en el laboratorio. unos y otros.

Sin embargo, puedo ver que puede no ser el caso para todos. A veces las personas no trabajan bien en entornos particulares o con ciertas personalidades. Creo que con un nuevo profesor, tanto las cosas buenas como las malas se magnifican. Porque como uno de los pocos estudiantes de posgrado en un laboratorio pequeño, tiene una gran oportunidad para realmente hacer una diferencia en el laboratorio, pero también está más expuesto: los nuevos profesores generalmente no están tan bien financiados. Si no puede trabajar bien bajo el estilo de gestión del profesor o con las personalidades de las pocas personas en el laboratorio, entonces será mucho más difícil lograr algo.

Aquí es donde entran las rotaciones o las pasantías. En mi universidad, los estudiantes graduados hicieron rotaciones durante algunas semanas en varios laboratorios para ver cuál encajaría bien. No hice ninguna rotación, pero hice una pasantía en un par de laboratorios antes de graduarme. Realmente disfruté trabajar para mi asesor de doctorado, así que me convertí en su estudiante graduado. Por lo tanto, mi consejo sería hacer rotaciones hasta que encuentre un asesor cuyo estilo de gestión se adapte a usted, con los miembros del laboratorio con los que pueda llevarse bien y cuyo trabajo le resulte atractivo. Si esta buena combinación resulta ser un nuevo laboratorio: ¡mucho mejor! Podrá marcar una diferencia aún mayor para usted y su asesor.