Como ex atleta del equipo universitario en una universidad de artes liberales altamente competitiva (Swarthmore), y como ex oficial de admisión que facilitó el proceso de reclutamiento atlético en la Ivy League y NESCAC, tengo algunos pensamientos de mi experiencia personal:
- Si eres un atleta universitario en la Ivy League (o una universidad selectiva de artes liberales como Swarthmore, Bowdoin, Amherst, etc.), no recibiste una beca deportiva. Estas instituciones solo ofrecen ayuda financiera basada en la necesidad.
- Si es admitido en una institución académica de primer nivel como atleta reclutado, el comité de admisiones cree que está equipado para tener éxito en el aula. De lo contrario, no te hubieran aceptado, independientemente de lo rápido que puedas lanzar una pelota de béisbol.
- Ser un atleta universitario universitario es un compromiso importante donde quiera que asista, y requiere que tenga fuertes habilidades de gestión del tiempo para tener éxito tanto en el aula como en el campo de juego. De hecho, siempre sentí que obtuve mi mejor rendimiento académico cuando estaba en temporada, porque durante esa época del año era más fácil presupuestar mi tiempo y centrarme solo en mis estudios y mi deporte.
- ¿Fue un desafío mantener el ritmo académico como atleta universitario? Sí, a veces, pero esta experiencia no se limita a estudiantes atletas. Además, estas instituciones cuentan con recursos para que los estudiantes atletas apoyen su progreso académico y su bienestar general.
- Creo que es importante que todos los estudiantes se abstengan de compararse con cualquier otra persona en el campus. Eres un individuo con talentos únicos. Fuiste admitido en la universidad según tus propias fortalezas. Usted es un contribuyente valioso para la universidad, tanto en el aula como en el ámbito deportivo. Todos en el campus aportan su propia experiencia y perspectiva únicas, todos pueden aprender algo unos de otros, todos merecen respeto.