No. La escuela te prepara para ser un empleado. Invierte en ti mismo. La verdadera educación comienza después de terminar la universidad.
El impulso a la acción se crea a través de la motivación y la inspiración. La mejor manera de imaginar la diferencia entre los dos es imaginar la motivación como un “empujón”, mientras que la inspiración es un “tirón”. La motivación te empuja a la acción y la inspiración te empuja a una acción de mayor propósito. Una persona inspirada está motivada para actuar, pero una persona motivada no está inspirada para actuar.
Necesitas inspirarte en una misión superior. Haz lo que tengas que hacer, sigue tu pasión, diviértete y compite contigo mismo. No trates de hacerte rico. Intenta convertirte en la mejor versión de ti mismo y, a veces, también puedes volverte muy rico. Es más un efecto secundario que un objetivo principal. Te sorprenderá y necesitarás algo de tiempo para reconocer conscientemente lo que realmente sucedió.