¿Qué opina el posmodernista sobre la educación?

Los posmodernos adoptan un enfoque de diversidad al considerar el papel de la educación. Argumentan que la visión marxista está desactualizada y que la sociedad ha entrado en una nueva fase posmoderna. Los marxistas creen que el capitalismo no puede funcionar sin una fuerza laboral que esté dispuesta a aceptar la explotación. También ven la educación como una reproducción y legitimación de la desigualdad de clase. Los posmodernos rechazan esta visión del marxismo, que todavía vivimos en una sociedad de dos clases y la afirmación de que la educación reproduce la desigualdad de clase. Los sociólogos posmodernos como Morrow y Torres consideran que las divisiones de clase ya no son importantes y que la sociedad ahora es mucho más diversa y fragmentada.
Los enfoques marxistas son útiles para exponer el “mito de la meritocracia”. Muestran el papel que juega la educación como un aparato ideológico del estado, al servicio de los intereses del capitalismo al reproducir y legitimar la desigualdad de clase. Sin embargo, los posmodernos critican el principio de correspondencia de Bowles y Gintis con el argumento de que la economía posfordista actual exige que las escuelas produzcan un tipo de fuerza laboral muy diferente del descrito por los marxistas.
Los posmodernistas argumentan que la economía se ha alejado de la producción en masa de la línea de ensamblaje y ahora se basa en una ‘especialización flexible’, donde la producción está personalizada para pequeños mercados especializados. Este sistema postfordista requiere una fuerza laboral capacitada y adaptable capaz de usar tecnología avanzada y transferir sus habilidades rápidamente de una tarea especializada a otra.
El posfordismo requiere un tipo diferente de sistema educativo. En lugar de preparar a los alumnos para que sean trabajadores poco calificados, mal pagados y obedientes, la educación debe fomentar la automotivación, la auto supervisión y la creatividad. También debe proporcionar capacitación de por vida porque el rápido cambio tecnológico y la competencia intensificada en la economía globalizada constantemente hacen que las habilidades existentes sean obsoletas.